Cerca de un arroyo de aguas frescas, había un pequeño bosque. Los árboles eran muy variados, con muchas flores y perfumes, y que de tanto esfuerzo que hacían, quedaban muy débiles y tenían poca fuerza para echar raíces.
En cambio un laurel dijo: -Yo, mejor, voy a invertir mi savia en tener una buena raíz: así creceré y podré dar mi hojas a todos los que me necesiten.
Los otros árboles estaban muy orgullosos de ser bellos; ¡en ningún lado había tantos colores y perfumes! y no dejaban de admirarse y de hablar de los encantos de unos y otros, y así, pasaban todo el tiempo, mirándose y riéndose de los demás.
El laurel sufría a cada instante esas burlas. Los otros se reían de él, señoreando sus flores y perfumes y meneando el abundante follaje le decían. -Laurel...., ¿para qué quieres tanta raíz? Míranos, a nosotros, todos nos alaban aunque tengamos poca raíz tenemos mucha belleza. Deja de pensar en ser útil a los demás. ¡Preocúpate de ti!".
Pero el laurel estaba convencido de lo contrario; necesitaba una fuerte raíz para dar abundantes hojas.
Un buen día, vino una gran tormenta, y sacudió, sopló sobre el bosque. Los árboles más grandes, que tenían un ramaje inmenso se vieron tan fuertemente golpeados, que por más que gritaban no pudieron evitar que el viento los volteara. En cambio el pequeño laurel, como tenía pocas ramas y mucha raíz, apenas si perdió unas cuantas hojas.
Entonces todos comprendieron que los que nos mantiene firmes en los momentos difíciles no son las apariencias, sino lo que está oculto en las raíces, dentro de tu corazón...,allí...,en tu alma.
lunes, 11 de mayo de 2009
EL PALO O LA ZANAHORIA
Tres hombres están trabajando en la construcción de un edificio. Alguien que es un observador externo se dirige a ellos y les pregunta '¿qué están ustedes haciendo?'
El primero, casi sin inmutarse, le responde: 'Aquí estoy poniendo ladrillos'
El segundo, levantando la cabeza y dejando a un lado por un momento su actividad, le comenta: 'Estamos construyendo un muro'
El tercero, orgulloso de su trabajo, afirma: 'Construimos la iglesia de mi pueblo'
Lo importante es la implicación con la gente que realiza la actividad. He aquí donde entra en juego la motivación, ya que la incorporación y la posterior retención de las personas en las organizaciones dependerá de muchos "intangibles" que van más allá de lo que puede ser utilizado en una relación profesional normal: sueldo, promoción, etc. Etimológicamente, el término motivación procede del latino motus y tenía que ver con aquello que movilizaba al sujeto para ejecutar una actividad. En el lenguaje popular, una persona está motivada cuando emprende algo con ilusión, superando el esfuerzo que deba realizar para obtenerlo. Así, podemos definir la motivación como el proceso psicológico por el cual alguien se plantea un objetivo, emplea los medios adecuados y mantiene la conducta con el fin de conseguir dicha meta.
Tradicionalmente, esa disposición se suele asociar a factores internos, frente a todo aquello que "tira" o empuja al sujeto desde fuera. Así, se distingue entre:
• Motivo. Variable que desde el interior del organismo nos impulsa a la acción.
• Incentivo. Factor externo que provoca la realización de un comportamiento. Ambos conceptos presuponen planteamientos diferentes en la explicación de la motivación. Podemos destacar tres enfoques:
1. Modelo de satisfacción de necesidades. Se insistirá en los elementos internos como los motores de la acción: los instintos, los impulsos o las necesidades. "No sólo de pan vive el hombre"
2. Modelo del incentivo. Se centrará en las variables externas: los incentivos o las recompensas. Si queremos que se inicie o que se mantenga un comportamiento, sólo tenemos un medio: el reforzamiento. Se suele distinguir: positivo y negativo. "¿Cómo motivar: el palo o la zanahoria?"
3. Modelos Cognitivos. Se pondrá el énfasis en el proceso cognitivo que realiza el individuo para tomar la decisión: la comparación, las expectativas o los objetivos. Modelos de equidad, expectativas y fijación de metas u objetivos. "No todos somos iguales"
"Ningún viento es favorable para el hombre que no sabe a dónde va? (Séneca)
Casi siempre se hallan en nuestras manos los recursos que pedimos al cielo"
(W. Shakespeare)
Al principio de la historia veíamos que los tres trabajadores ejecutaban una misma actividad, sin embargo cada uno la vivía de manera diferente. ¿Qué ocurre? No sólo es importante realizar algo, sino la actitud con la que lo llevemos a cabo. Podemos cumplir objetivos, conseguir metas e incentivos y a pesar de todo no sentirnos contentos. De ahí que sea tan importante el sentido con el que hagamos las actividades. No es raro encontrar detrás de muchas frustraciones y abandonos una cierta desidia e indiferencia. ¿Cómo podemos llenar una tarea de sentido? Como afirmaba el gaucho Martín Fierro, " a veces es conveniente captar las sombras para poder valorar la luz".
El primero, casi sin inmutarse, le responde: 'Aquí estoy poniendo ladrillos'
El segundo, levantando la cabeza y dejando a un lado por un momento su actividad, le comenta: 'Estamos construyendo un muro'
El tercero, orgulloso de su trabajo, afirma: 'Construimos la iglesia de mi pueblo'
Lo importante es la implicación con la gente que realiza la actividad. He aquí donde entra en juego la motivación, ya que la incorporación y la posterior retención de las personas en las organizaciones dependerá de muchos "intangibles" que van más allá de lo que puede ser utilizado en una relación profesional normal: sueldo, promoción, etc. Etimológicamente, el término motivación procede del latino motus y tenía que ver con aquello que movilizaba al sujeto para ejecutar una actividad. En el lenguaje popular, una persona está motivada cuando emprende algo con ilusión, superando el esfuerzo que deba realizar para obtenerlo. Así, podemos definir la motivación como el proceso psicológico por el cual alguien se plantea un objetivo, emplea los medios adecuados y mantiene la conducta con el fin de conseguir dicha meta.
Tradicionalmente, esa disposición se suele asociar a factores internos, frente a todo aquello que "tira" o empuja al sujeto desde fuera. Así, se distingue entre:
• Motivo. Variable que desde el interior del organismo nos impulsa a la acción.
• Incentivo. Factor externo que provoca la realización de un comportamiento. Ambos conceptos presuponen planteamientos diferentes en la explicación de la motivación. Podemos destacar tres enfoques:
1. Modelo de satisfacción de necesidades. Se insistirá en los elementos internos como los motores de la acción: los instintos, los impulsos o las necesidades. "No sólo de pan vive el hombre"
2. Modelo del incentivo. Se centrará en las variables externas: los incentivos o las recompensas. Si queremos que se inicie o que se mantenga un comportamiento, sólo tenemos un medio: el reforzamiento. Se suele distinguir: positivo y negativo. "¿Cómo motivar: el palo o la zanahoria?"
3. Modelos Cognitivos. Se pondrá el énfasis en el proceso cognitivo que realiza el individuo para tomar la decisión: la comparación, las expectativas o los objetivos. Modelos de equidad, expectativas y fijación de metas u objetivos. "No todos somos iguales"
"Ningún viento es favorable para el hombre que no sabe a dónde va? (Séneca)
Casi siempre se hallan en nuestras manos los recursos que pedimos al cielo"
(W. Shakespeare)
Al principio de la historia veíamos que los tres trabajadores ejecutaban una misma actividad, sin embargo cada uno la vivía de manera diferente. ¿Qué ocurre? No sólo es importante realizar algo, sino la actitud con la que lo llevemos a cabo. Podemos cumplir objetivos, conseguir metas e incentivos y a pesar de todo no sentirnos contentos. De ahí que sea tan importante el sentido con el que hagamos las actividades. No es raro encontrar detrás de muchas frustraciones y abandonos una cierta desidia e indiferencia. ¿Cómo podemos llenar una tarea de sentido? Como afirmaba el gaucho Martín Fierro, " a veces es conveniente captar las sombras para poder valorar la luz".
CONSTANCIA
La constancia es la virtud que nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a dificultades
La constancia es la virtud que nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a dificultades externas o internas, o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido. La constancia sustenta el trabajo en una fuerza de voluntad sólida y en un esfuerzo continuado para llegar a la meta propuesta venciendo las dificultades e incluso venciéndonos a nosotros mismos.
Meta
Contrarrestar los efectos del ambiente actual que busca y promueve logros fáciles en donde las metas se consiguen de manera inmediata, sin que sea necesario un esfuerzo real.
Por qué nos interesa
¨ Porque la constancia es necesaria para lograr cualquier meta o hábito positivo.
¨ Porque cualquier logro en la vida implica un esfuerzo sostenido que debe sustentarse en la fortaleza.
¨ Porque el esfuerzo sostenido fortalece la voluntad, elemento indispensable en la vida de todo hombre o mujer maduros.
¨ Porque la constancia se convierte en motivación para seguir adelante.
¨ Porque la constancia en la superación de las dificultades conduce a la perseverancia.
¨ Porque la constancia nos hace lograr las metas propuestas y por consiguiente nos induce a sentirnos satisfechos. El resultado será tener la convicción de poder cumplir a pesar de las dificultades.
¨ Porque la constancia es un apoyo en la formación de la responsabilidad, que es saber responder a una misión a pesar de las dificultades o el tiempo.
¨ Porque sólo quien persevera llega a la meta.
¨ Porque una de las características de la personalidad madura es ser constante en sus determinaciones.
Que significa vivirla
¨ Adquirir retos concretos y cumplirlos.
¨ No cambiar de decisión a la primera dificultad.
¨ Hacer opciones estables y mantenerlas en el tiempo.
¨ Cumplir aquí y ahora lo que se debe y cuando se debe.
¨ No decir “podría” y “me gustaría”, sino “puedo y lo lograré”.
¨ No dejar las cosas para después.
¨ Terminar lo que se comienza. No dejar los juegos, tareas y encargos a la mitad.
¨ No desalentarse ante las dificultades.
¨ Saber esperar.
¨ Llevar a cabo las ideas, no solamente imaginarlas.
¨ Hacer las cosas en el momento, y hacerlas bien.
¨ Cumplir con esfuerzos aparentemente pequeños y sin importancia.
¨ Mantener el máximo esfuerzo de principio a fin.
¨ Vencerse a sí mismo.
Qué la facilita
¨ Tener motivos sólidos y trascendentes que impulsen las acciones. Si se tienen claros estos motivos la constancia será más fácil.
¨ Conocer y haber experimentado los beneficios que trae el ser constantes; la satisfacción de ver realizado aquello que se planeó y proyectó, el deber cumplido)
La constancia es la virtud que nos conduce a llevar a cabo lo necesario para alcanzar las metas que nos hemos propuesto, pese a dificultades externas o internas, o a la disminución de la motivación personal por el tiempo transcurrido. La constancia sustenta el trabajo en una fuerza de voluntad sólida y en un esfuerzo continuado para llegar a la meta propuesta venciendo las dificultades e incluso venciéndonos a nosotros mismos.
Meta
Contrarrestar los efectos del ambiente actual que busca y promueve logros fáciles en donde las metas se consiguen de manera inmediata, sin que sea necesario un esfuerzo real.
Por qué nos interesa
¨ Porque la constancia es necesaria para lograr cualquier meta o hábito positivo.
¨ Porque cualquier logro en la vida implica un esfuerzo sostenido que debe sustentarse en la fortaleza.
¨ Porque el esfuerzo sostenido fortalece la voluntad, elemento indispensable en la vida de todo hombre o mujer maduros.
¨ Porque la constancia se convierte en motivación para seguir adelante.
¨ Porque la constancia en la superación de las dificultades conduce a la perseverancia.
¨ Porque la constancia nos hace lograr las metas propuestas y por consiguiente nos induce a sentirnos satisfechos. El resultado será tener la convicción de poder cumplir a pesar de las dificultades.
¨ Porque la constancia es un apoyo en la formación de la responsabilidad, que es saber responder a una misión a pesar de las dificultades o el tiempo.
¨ Porque sólo quien persevera llega a la meta.
¨ Porque una de las características de la personalidad madura es ser constante en sus determinaciones.
Que significa vivirla
¨ Adquirir retos concretos y cumplirlos.
¨ No cambiar de decisión a la primera dificultad.
¨ Hacer opciones estables y mantenerlas en el tiempo.
¨ Cumplir aquí y ahora lo que se debe y cuando se debe.
¨ No decir “podría” y “me gustaría”, sino “puedo y lo lograré”.
¨ No dejar las cosas para después.
¨ Terminar lo que se comienza. No dejar los juegos, tareas y encargos a la mitad.
¨ No desalentarse ante las dificultades.
¨ Saber esperar.
¨ Llevar a cabo las ideas, no solamente imaginarlas.
¨ Hacer las cosas en el momento, y hacerlas bien.
¨ Cumplir con esfuerzos aparentemente pequeños y sin importancia.
¨ Mantener el máximo esfuerzo de principio a fin.
¨ Vencerse a sí mismo.
Qué la facilita
¨ Tener motivos sólidos y trascendentes que impulsen las acciones. Si se tienen claros estos motivos la constancia será más fácil.
¨ Conocer y haber experimentado los beneficios que trae el ser constantes; la satisfacción de ver realizado aquello que se planeó y proyectó, el deber cumplido)
Y ALGO MAS...
El futuro parece brillante cuando la actitud es correcta, en todo momento, nuestras actitudes hacia la vida siguen en formación. Cuando las cosas se ponen difíciles, debemos recordar que lo que verdaderamente importa es lo que ocurre dentro de nosotros; nos volvemos aquello en que pensamos.
Lo que realmente cuenta es lo que le damos a la vida, no lo que la vida nos da. Un optimista encuentra una oportunidad en cada dificultad, mientras que un pesimista encuentra una dificultad en cada oportunidad.
Nuestras acciones determinan nuestros sentimientos tanto como nuestros sentimientos determinan nuestras acciones; y el dar largas a las cosas hace fertilizar el temor. Se necesita acción para superar el temor.
Piense usted por un momento porque damos largas a las cosas; algunos creen que dar largas es una deficiencia genética integrada, incurable como alguna enfermedad, o que forma parte de su personalidad. Dar largas a las cosas es un hábito y, además, un mal hábito; es importante quebrantarlo antes de que nos quebrante a nosotros.
Las oportunidades no se le ofrecen a quien espera; las aprovechan quienes se atreven a intentar las cosas. La energía necesaria para hacer algo rara vez surge en nosotros hasta después que nos hemos lanzado a la tarea.
Y esta fuerza surge después que nos hemos obligado a empezar. La vacilación disipa la energía.
A las personas que han sido productivas y han tenido éxito en la vida se les recuerda en gran parte por haber sido gente de acción. Tuvieron iniciativa para que las cosas se hicieran.
Su inteligencia original pudo tener muy poco que ver con sus realizaciones y su educación escolar bien pudo contribuir sólo parcialmente a sus logros.
Alguien resumió su éxito en tres palabras «Y algo más». Descubrió desde temprana edad que casi toda la diferencia entre las personas medianas y las superiores puede explicarse en tres palabras.
Las personas superiores hacían lo que se esperaba de ellas...y algo más. Eran considerados con los demás, eran bondadosos y amables... y algo más. Cumplían con sus obligaciones y responsabilidades completa y claramente... y algo más. Podía contarse con ellos en caso de emergencia... y algo más.
Lo que realmente cuenta es lo que le damos a la vida, no lo que la vida nos da. Un optimista encuentra una oportunidad en cada dificultad, mientras que un pesimista encuentra una dificultad en cada oportunidad.
Nuestras acciones determinan nuestros sentimientos tanto como nuestros sentimientos determinan nuestras acciones; y el dar largas a las cosas hace fertilizar el temor. Se necesita acción para superar el temor.
Piense usted por un momento porque damos largas a las cosas; algunos creen que dar largas es una deficiencia genética integrada, incurable como alguna enfermedad, o que forma parte de su personalidad. Dar largas a las cosas es un hábito y, además, un mal hábito; es importante quebrantarlo antes de que nos quebrante a nosotros.
Las oportunidades no se le ofrecen a quien espera; las aprovechan quienes se atreven a intentar las cosas. La energía necesaria para hacer algo rara vez surge en nosotros hasta después que nos hemos lanzado a la tarea.
Y esta fuerza surge después que nos hemos obligado a empezar. La vacilación disipa la energía.
A las personas que han sido productivas y han tenido éxito en la vida se les recuerda en gran parte por haber sido gente de acción. Tuvieron iniciativa para que las cosas se hicieran.
Su inteligencia original pudo tener muy poco que ver con sus realizaciones y su educación escolar bien pudo contribuir sólo parcialmente a sus logros.
Alguien resumió su éxito en tres palabras «Y algo más». Descubrió desde temprana edad que casi toda la diferencia entre las personas medianas y las superiores puede explicarse en tres palabras.
Las personas superiores hacían lo que se esperaba de ellas...y algo más. Eran considerados con los demás, eran bondadosos y amables... y algo más. Cumplían con sus obligaciones y responsabilidades completa y claramente... y algo más. Podía contarse con ellos en caso de emergencia... y algo más.
ALAS PARA VOLAR
¿Cuántas veces nos sentimos sin alas para volar no? Es como que algo tiró fuerte de ellas y sentimos como que se desprendieron de nuestro cuerpo y miramos y no las encontramos... Las teníamos y en ese volar caímos en pantanos y agitados por salir se lastimaron, se ensuciaron y el barro hizo que su peso sea mayor que el de nuestro cuerpo y nos costó volar...
Nos quedamos muchas veces en el suelo esperando que se alivianen para seguir pero el barro a medida que se secaba las endurecía aún más.
Y allí estamos hoy... Con alas endurecidas y sin poder volar o sin alas...
¿Qué nos pasó? ¿Por qué lugares volamos que nos quedamos sin fuerzas, sin ganas, sin esperanzas?
Alas... Nos hace falta tener nuevamente nuestras alas abiertas... Nos hace
falta sentir que vale la pena seguir...
La vida nos demuestra a cada paso que nuestro vuelo no siempre es el que
esperamos, que hay pantanos como así también aves de rapiña que quieren que desistamos, que ya no avancemos...
¿Sentimos temor por el futuro? ¿Estamos todavía tratando de salir de ese
pantano? ¿Estamos agotados? ¿Equivocamos el camino y estamos perdidos en la oscuridad? ¿Deseamos que la vida ponga su punto final ahora? ¿Por qué?
El dolor puede ser enorme, la tristeza profunda, lo sucedido inolvidable, y
si todo cambia? ¿Y si de pronto nos encontramos ayudando a otros a salir del pantano?
No hay ningún pájaro que haya volado toda su vida sobre un oasis o sobre un manantial... No... Todos sienten en un momento deseos de no seguir.
Todos se enfrentan a grandes tormentas, a fuertes vientos que sacuden su vida entera. Todos alguna vez se sienten ahogados por haber caido en tierras pantanosas...
Pero sin embargo sacuden sus alas aún hasta en sus últimos minutos con la esperanza de seguir y por sobre todo de volver a volar... Extendamos nosotros también nuestras alas... Tengamos esperanza, apostemos a la vida, miremos el horizonte y solo giremos la cabeza para decir adiós a todo aquello que nos hizo perder nuestras ganas de seguir volando hacia el infinito.
Fuente: Graciela De Filippis
Nos quedamos muchas veces en el suelo esperando que se alivianen para seguir pero el barro a medida que se secaba las endurecía aún más.
Y allí estamos hoy... Con alas endurecidas y sin poder volar o sin alas...
¿Qué nos pasó? ¿Por qué lugares volamos que nos quedamos sin fuerzas, sin ganas, sin esperanzas?
Alas... Nos hace falta tener nuevamente nuestras alas abiertas... Nos hace
falta sentir que vale la pena seguir...
La vida nos demuestra a cada paso que nuestro vuelo no siempre es el que
esperamos, que hay pantanos como así también aves de rapiña que quieren que desistamos, que ya no avancemos...
¿Sentimos temor por el futuro? ¿Estamos todavía tratando de salir de ese
pantano? ¿Estamos agotados? ¿Equivocamos el camino y estamos perdidos en la oscuridad? ¿Deseamos que la vida ponga su punto final ahora? ¿Por qué?
El dolor puede ser enorme, la tristeza profunda, lo sucedido inolvidable, y
si todo cambia? ¿Y si de pronto nos encontramos ayudando a otros a salir del pantano?
No hay ningún pájaro que haya volado toda su vida sobre un oasis o sobre un manantial... No... Todos sienten en un momento deseos de no seguir.
Todos se enfrentan a grandes tormentas, a fuertes vientos que sacuden su vida entera. Todos alguna vez se sienten ahogados por haber caido en tierras pantanosas...
Pero sin embargo sacuden sus alas aún hasta en sus últimos minutos con la esperanza de seguir y por sobre todo de volver a volar... Extendamos nosotros también nuestras alas... Tengamos esperanza, apostemos a la vida, miremos el horizonte y solo giremos la cabeza para decir adiós a todo aquello que nos hizo perder nuestras ganas de seguir volando hacia el infinito.
Fuente: Graciela De Filippis
EL AGUILA
El águila es una de las aves de mayor longevidad. Llega a vivir 70 años. Pero para llegar a esa edad, en su cuarta década tiene que tomar una seria y difícil decisión.
A los 40 años, ya sus uñas se volvieron tan largas y flexibles que no puede sujetar a las presas de las cuales se alimenta. El pico alargado y en punta, se curva demasiado y ya no le sirve. Apuntando contra el pecho están las alas, envejecidas y pesadas en función del gran tamaño de sus plumas, y para entonces, volar se vuelve muy difícil. Entonces, tiene sólo dos alternativas: dejarse estar y morir... o enfrentarse a un doloroso proceso de renovación que le llevará aproximadamente 150 días.
Ese proceso consiste en volar a lo alto de una montaña y recogerse en un nido, próximo a un paredón donde no necesita volar y se siente más protegida. Entonces, una vez encontrado el lugar adecuado, el águila comienza a golpear la roca con el pico... hasta arrancarlo. Luego espera que le nazca un nuevo pico con el cual podrá arrancar sus viejas uñas inservibles. Cuando las nuevas uñas comienzan a crecer, ella desprende una a una sus viejas y sobrecrecidas plumas. Y después de todos esos largos y dolorosos cinco meses de heridas, cicatrizaciones y crecimiento, logra realizar su famoso vuelo de renovación, renacimiento y festejo para vivir otros 30 años más.
En nuestra vida también nos toca sufrir procesos de reconversión para no sucumbir. Tenemos quizá que resguardarnos por algún tiempo, meditar, someternos a ciertos sacrificios para llevar a cabo algunos cambios.
A los 40 años, ya sus uñas se volvieron tan largas y flexibles que no puede sujetar a las presas de las cuales se alimenta. El pico alargado y en punta, se curva demasiado y ya no le sirve. Apuntando contra el pecho están las alas, envejecidas y pesadas en función del gran tamaño de sus plumas, y para entonces, volar se vuelve muy difícil. Entonces, tiene sólo dos alternativas: dejarse estar y morir... o enfrentarse a un doloroso proceso de renovación que le llevará aproximadamente 150 días.
Ese proceso consiste en volar a lo alto de una montaña y recogerse en un nido, próximo a un paredón donde no necesita volar y se siente más protegida. Entonces, una vez encontrado el lugar adecuado, el águila comienza a golpear la roca con el pico... hasta arrancarlo. Luego espera que le nazca un nuevo pico con el cual podrá arrancar sus viejas uñas inservibles. Cuando las nuevas uñas comienzan a crecer, ella desprende una a una sus viejas y sobrecrecidas plumas. Y después de todos esos largos y dolorosos cinco meses de heridas, cicatrizaciones y crecimiento, logra realizar su famoso vuelo de renovación, renacimiento y festejo para vivir otros 30 años más.
En nuestra vida también nos toca sufrir procesos de reconversión para no sucumbir. Tenemos quizá que resguardarnos por algún tiempo, meditar, someternos a ciertos sacrificios para llevar a cabo algunos cambios.
LA MAGIA DEL ENTUSIASMO
Los integrantes de una humilde familia hacían lo posible por ser felices, pero como eran tiempos duros, a veces resultaba difícil. Bastaba con ver la fachada de su casa para darse cuenta de que algo no iba bien. Ya no se preocupaban por limpiar las ventanas, ni cuidar el pequeño jardín que tenían al frente. La cerca estaba totalmente desbaratada y la puerta principal ya no tenía pintura.
Un día, el hijo mayor fue al mercado y mientras estaba allí, observaba con curiosidad a la gente entusiasta que compraba. Le llamó poderosamente la atención un bello jarrón, en un pequeño puesto donde vendían artículos de segunda mano. Al verlo, entusiasmado, buscó las pocas monedas que tenía en el bolsillo; era lo justo que se requería para comprarlo, pero hacerlo significaba que se quedarían sin dinero. Pensó que no estaban para derroches, pero era tan especial… Además, a su mamá le encantaría. El vendedor, mientras se lo envolvía, le dijo: 'Disfrútalo y cuídalo mucho, porque este jarrón es mágico'. Y en efecto, toda la familia se entusiasmó con su compra, y nadie le reprochó que se hubiera gastado sus últimas monedas en él.
Un día, al observar la belleza del jarrón, el padre se dio cuenta de lo arruinada
y descuidada que estaba la sala. Así que sin pensarlo, entusiasta, buscó la brocha y un poco de pintura que quedaba y en pocas horas dejó la habitación como nueva.
Cuando el segundo hijo vio lo bien que quedó la sala, tomó un cubo con agua y jabón y lavó todas las ventanas. Cuando el tercer hijo miró a través de estas, notó el terrible estado en el que estaba el jardín, así que cortó el césped, quitó las malas hierbas y removió la tierra.
El cuarto hijo, al ver la tierra limpia, plantó semillas. Cuando llegó el verano, la hija menor salió al jardín y notó que habían florecido las margaritas; cortó algunas y se las llevó a su madre para que las pusiera en el jarrón". Cuando perdemos la motivación, el entusiasmo y la alegría, caemos fácilmente en un estado de abandono y apatía que se refleja en todas las áreas de nuestra vida. La mayoría de las veces nos quedamos esperando a que alguien tome la iniciativa o que pase un evento con la suficiente fuerza como para cambiar y mejorar nuestra condición de vida, sin que tengamos que hacer algo para conseguirlo.
Nuestra felicidad no depende de lo que tenemos o de lo que todavía no hemos podido conseguir. La felicidad depende básicamente de nuestra actitud y de la forma de asumir e interpretar la vida; no se experimenta afuera, sino adentro y cada uno de nosotros puede recuperar la motivación y el entusiasmo necesarios para construir su propia felicidad.
Cuando nos sentimos a gusto con nosotros mismos, disfrutamos cada cosa que hacemos, y aceptamos y resaltamos los elementos positivos que tiene el lugar donde estamos, experimentamos la felicidad, que no es otra cosa que ese sentimiento de plenitud y de alegría interior. Cuando abrigamos sueños y trabajamos por la realización de los mismos; cuando tenemos metas, aunque estas sean pequeñas y cumplimos con ellas, atesoramos la satisfacción silenciosa de haberlas alcanzado a pesar de tantos obstáculos superados.
Muchas veces elegimos ser infelices por causa de situaciones pequeñas e intrascendentes a las que prestamos demasiada atención, permitiéndoles que nos afecten profundamente y que nos hagan perder el equilibrio y la felicidad que teníamos. Dejemos de prestarle atención a todo aquello que se presenta en forma negativa o diferente a lo que esperábamos, tomemos la decisión de atender y mostrarle interés sólo a todo lo bueno y lo grato que nos suceda cada día, aunque sea muy pequeño; de esta manera podremos extender el bienestar y la alegría que nos permitirán superar los momentos difíciles, y disfrutar más de la vida.
Claves para retomar la vida con entusiasmo:
Realiza tus tareas con alegría. Cuando hacemos nuestro trabajo con calidad, pasión, amor y entrega, podemos proyectar lo mejor de nosotros y conseguir los mejores resultados. Cambia las viejas fórmulas. Si te repites una y otra vez los mismos pensamientos negativos, si te dejas manipular creyendo que la felicidad consiste en comprar y acumular, te alejarás cada vez más de la felicidad verdadera.
Involúcrate en nuevos proyectos. Es preciso renovar nuestra vida, llenarla de emociones y de proyectos nuevos. Siempre que te encuentres decaído y desanimado, haz algo que esté fuera de la rutina y renueva tu estado de ánimo. Todo, absolutamente todo puede convertirse en una actividad gratificante cuando se realiza con una actitud apropiada y el deseo de ser felices.
¡Suelta el pasado, deja de preocuparte por el futuro, vive el presente, la vida es maravillosa, todo va a estar muy bien!
Un día, el hijo mayor fue al mercado y mientras estaba allí, observaba con curiosidad a la gente entusiasta que compraba. Le llamó poderosamente la atención un bello jarrón, en un pequeño puesto donde vendían artículos de segunda mano. Al verlo, entusiasmado, buscó las pocas monedas que tenía en el bolsillo; era lo justo que se requería para comprarlo, pero hacerlo significaba que se quedarían sin dinero. Pensó que no estaban para derroches, pero era tan especial… Además, a su mamá le encantaría. El vendedor, mientras se lo envolvía, le dijo: 'Disfrútalo y cuídalo mucho, porque este jarrón es mágico'. Y en efecto, toda la familia se entusiasmó con su compra, y nadie le reprochó que se hubiera gastado sus últimas monedas en él.
Un día, al observar la belleza del jarrón, el padre se dio cuenta de lo arruinada
y descuidada que estaba la sala. Así que sin pensarlo, entusiasta, buscó la brocha y un poco de pintura que quedaba y en pocas horas dejó la habitación como nueva.
Cuando el segundo hijo vio lo bien que quedó la sala, tomó un cubo con agua y jabón y lavó todas las ventanas. Cuando el tercer hijo miró a través de estas, notó el terrible estado en el que estaba el jardín, así que cortó el césped, quitó las malas hierbas y removió la tierra.
El cuarto hijo, al ver la tierra limpia, plantó semillas. Cuando llegó el verano, la hija menor salió al jardín y notó que habían florecido las margaritas; cortó algunas y se las llevó a su madre para que las pusiera en el jarrón". Cuando perdemos la motivación, el entusiasmo y la alegría, caemos fácilmente en un estado de abandono y apatía que se refleja en todas las áreas de nuestra vida. La mayoría de las veces nos quedamos esperando a que alguien tome la iniciativa o que pase un evento con la suficiente fuerza como para cambiar y mejorar nuestra condición de vida, sin que tengamos que hacer algo para conseguirlo.
Nuestra felicidad no depende de lo que tenemos o de lo que todavía no hemos podido conseguir. La felicidad depende básicamente de nuestra actitud y de la forma de asumir e interpretar la vida; no se experimenta afuera, sino adentro y cada uno de nosotros puede recuperar la motivación y el entusiasmo necesarios para construir su propia felicidad.
Cuando nos sentimos a gusto con nosotros mismos, disfrutamos cada cosa que hacemos, y aceptamos y resaltamos los elementos positivos que tiene el lugar donde estamos, experimentamos la felicidad, que no es otra cosa que ese sentimiento de plenitud y de alegría interior. Cuando abrigamos sueños y trabajamos por la realización de los mismos; cuando tenemos metas, aunque estas sean pequeñas y cumplimos con ellas, atesoramos la satisfacción silenciosa de haberlas alcanzado a pesar de tantos obstáculos superados.
Muchas veces elegimos ser infelices por causa de situaciones pequeñas e intrascendentes a las que prestamos demasiada atención, permitiéndoles que nos afecten profundamente y que nos hagan perder el equilibrio y la felicidad que teníamos. Dejemos de prestarle atención a todo aquello que se presenta en forma negativa o diferente a lo que esperábamos, tomemos la decisión de atender y mostrarle interés sólo a todo lo bueno y lo grato que nos suceda cada día, aunque sea muy pequeño; de esta manera podremos extender el bienestar y la alegría que nos permitirán superar los momentos difíciles, y disfrutar más de la vida.
Claves para retomar la vida con entusiasmo:
Realiza tus tareas con alegría. Cuando hacemos nuestro trabajo con calidad, pasión, amor y entrega, podemos proyectar lo mejor de nosotros y conseguir los mejores resultados. Cambia las viejas fórmulas. Si te repites una y otra vez los mismos pensamientos negativos, si te dejas manipular creyendo que la felicidad consiste en comprar y acumular, te alejarás cada vez más de la felicidad verdadera.
Involúcrate en nuevos proyectos. Es preciso renovar nuestra vida, llenarla de emociones y de proyectos nuevos. Siempre que te encuentres decaído y desanimado, haz algo que esté fuera de la rutina y renueva tu estado de ánimo. Todo, absolutamente todo puede convertirse en una actividad gratificante cuando se realiza con una actitud apropiada y el deseo de ser felices.
¡Suelta el pasado, deja de preocuparte por el futuro, vive el presente, la vida es maravillosa, todo va a estar muy bien!
VOLAR COMO UN HALCON
Un rey recibió como obsequio dos pequeños halcones y los entregó al maestro de cetrería para que los entrenara.
Pasado unos meses el maestro le informó al rey que uno de los halcones estaba perfectamente, pero que al otro no sabía que le sucedía, no se había movido de la rama donde lo dejó desde el día que llegó.
El rey mandó a llamar a curanderos y sanadores para que vieran al halcón, pero nadie pudo hacerlo volar.
Al día siguiente el monarca decidió comunicar a su pueblo que ofrecería una recompensa a la persona que hiciera volar al halcón. A la mañana siguiente, vio al halcón volando ágilmente por los jardines. El rey le dijo a su corte, "Traedme al autor de este milagro."
Su corte le llevó a un humilde campesino. El rey le preguntó: "¿Tú hiciste volar al halcón? ¿Cómo lo hiciste? ¿Eres acaso un mago?".
Intimidado el campesino le dijo al rey, "Fue fácil mi Señor, sólo corté la rama y el halcón voló, se dio cuenta que tenía alas y se largó a volar."
¿Sabes que tienes alas ? ¿Sabes que puedes volar? ¿A qué te estás aferrando? ¿De qué no te puedes soltar?
No puedes descubrir nuevos mares a menos que tengas el coraje para volar.
Vivimos dentro de una zona de comodidad, allí viven nuestros temores, nuestros valores y nuestras limitaciones. En esa zona reina nuestro pasado y nuestra historia, y por lo general creemos que es nuestro único lugar y modo de vivir.
Tenemos sueños, queremos resultados pero no estamos dispuestos a correr riesgos, nos conformamos con lo que tenemos, creemos que es lo único y posible y aprendemos a vivir desde la resignación.
El liderazgo es la habilidad que podemos adquirir cuando estamos dispuestos a correr riesgos, cuando aprendemos a caminar en la cuerda floja, cuando estamos dispuestos a levantar la vara que mide nuestro potencial.
Un verdadero líder tiene:
> Seguridad en sí mismo para permanecer sólo.
> Coraje para tomar decisiones difíciles.
> Audacia, para transitar hacia nuevos horizontes con pasión
> Ternura suficiente para escuchar las necesidades de los demás.
El hombre no busca ser un líder, se convierte en uno de ellos por la calidad de sus acciones y la integridad de sus intentos.
Los líderes son como los halcones, no vuelan en bandadas, los encuentras cada tanto y volando alto.
Pasado unos meses el maestro le informó al rey que uno de los halcones estaba perfectamente, pero que al otro no sabía que le sucedía, no se había movido de la rama donde lo dejó desde el día que llegó.
El rey mandó a llamar a curanderos y sanadores para que vieran al halcón, pero nadie pudo hacerlo volar.
Al día siguiente el monarca decidió comunicar a su pueblo que ofrecería una recompensa a la persona que hiciera volar al halcón. A la mañana siguiente, vio al halcón volando ágilmente por los jardines. El rey le dijo a su corte, "Traedme al autor de este milagro."
Su corte le llevó a un humilde campesino. El rey le preguntó: "¿Tú hiciste volar al halcón? ¿Cómo lo hiciste? ¿Eres acaso un mago?".
Intimidado el campesino le dijo al rey, "Fue fácil mi Señor, sólo corté la rama y el halcón voló, se dio cuenta que tenía alas y se largó a volar."
¿Sabes que tienes alas ? ¿Sabes que puedes volar? ¿A qué te estás aferrando? ¿De qué no te puedes soltar?
No puedes descubrir nuevos mares a menos que tengas el coraje para volar.
Vivimos dentro de una zona de comodidad, allí viven nuestros temores, nuestros valores y nuestras limitaciones. En esa zona reina nuestro pasado y nuestra historia, y por lo general creemos que es nuestro único lugar y modo de vivir.
Tenemos sueños, queremos resultados pero no estamos dispuestos a correr riesgos, nos conformamos con lo que tenemos, creemos que es lo único y posible y aprendemos a vivir desde la resignación.
El liderazgo es la habilidad que podemos adquirir cuando estamos dispuestos a correr riesgos, cuando aprendemos a caminar en la cuerda floja, cuando estamos dispuestos a levantar la vara que mide nuestro potencial.
Un verdadero líder tiene:
> Seguridad en sí mismo para permanecer sólo.
> Coraje para tomar decisiones difíciles.
> Audacia, para transitar hacia nuevos horizontes con pasión
> Ternura suficiente para escuchar las necesidades de los demás.
El hombre no busca ser un líder, se convierte en uno de ellos por la calidad de sus acciones y la integridad de sus intentos.
Los líderes son como los halcones, no vuelan en bandadas, los encuentras cada tanto y volando alto.
miércoles, 6 de mayo de 2009
HIMNO DEL SENA.
CORO.
ESTUDIANTES DEL SENA ADELANTE
POR COLOMBIA LUCHANDO CON AMOR
CON EL ÁNIMO NOBLE Y RADIANTE
TRANSFORMEMOSLE EL MUNDO MEJOR.
I
DE LA PATRIA EL FUTURO DESTINO
EN LAS MANOS DEL JOVEN ESTA
EL TRABAJO ES SEGURO CAMINO
QUE EL PROGRESO A COLOMBIA DARÁ.
II
EN LA FORJA DEL SENA SE FORMAN
HOMBRES LIBRES QUE ANHELAN TRIUNFAR
CON LA CIENCIA Y LA TECNICA UNIDAS
NUEVOS RUMBOS DE PAZ TRAZARAN.
III
HOY LA PATRIA NOS GRITA SENTIDA
ESTUDIANTES DEL SENA TRIUNFAD
SOLO ASI LOGRAREIS EN LA VIDA
MÁS JUSTICIA MAYOR LIBERTAD.
IV
AVANCEMOS CON FUERZA GUERRERA
ESTUDIANTES CON FIRME TESON
QUE LA PATRIA EN NOSOTROS ESPERA
SU PACIFICA REVOLUCIÓN.
CORO.
ESTUDIANTES DEL SENA ADELANTE
POR COLOMBIA LUCHANDO CON AMOR
CON EL ÁNIMO NOBLE Y RADIANTE
TRANSFORMEMOSLE EL MUNDO MEJOR
ESTUDIANTES DEL SENA ADELANTE
POR COLOMBIA LUCHANDO CON AMOR
CON EL ÁNIMO NOBLE Y RADIANTE
TRANSFORMEMOSLE EL MUNDO MEJOR.
I
DE LA PATRIA EL FUTURO DESTINO
EN LAS MANOS DEL JOVEN ESTA
EL TRABAJO ES SEGURO CAMINO
QUE EL PROGRESO A COLOMBIA DARÁ.
II
EN LA FORJA DEL SENA SE FORMAN
HOMBRES LIBRES QUE ANHELAN TRIUNFAR
CON LA CIENCIA Y LA TECNICA UNIDAS
NUEVOS RUMBOS DE PAZ TRAZARAN.
III
HOY LA PATRIA NOS GRITA SENTIDA
ESTUDIANTES DEL SENA TRIUNFAD
SOLO ASI LOGRAREIS EN LA VIDA
MÁS JUSTICIA MAYOR LIBERTAD.
IV
AVANCEMOS CON FUERZA GUERRERA
ESTUDIANTES CON FIRME TESON
QUE LA PATRIA EN NOSOTROS ESPERA
SU PACIFICA REVOLUCIÓN.
CORO.
ESTUDIANTES DEL SENA ADELANTE
POR COLOMBIA LUCHANDO CON AMOR
CON EL ÁNIMO NOBLE Y RADIANTE
TRANSFORMEMOSLE EL MUNDO MEJOR
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